La crema Crecy de zanahorias, es la receta ideal para las cenas de primavera. En esta época del año, los días empiezan a ser más cálidos, pero por las noches refresca y las temperaturas todavía nos piden algún plato de cuchara que nos ayude a entonarnos.
Esta crema conocida también como "crème à la Crécy" toma su nombre de una localidad francesa -Crécy-la-Chapelle-, famosa por la calidad de sus zanahorias. Además se da el apellido a la Crécy a muchas recetas de guisos que llevan zanahoria entre sus ingredientes principales. En ocasiones lo veréis también escrito con "z" convirtiéndose en a la Crezy.
La receta es muy sencilla y se basa en una crema de zanahorias y puerro, -cocidos en caldo de verduras o de ave- y ligada con arroz cocido o con harina. Una vez triturada, la crema Crecy de zanahorias es una delicia que podemos retocar con nata líquida o completar con algún tropezón, como brotes vegetales, trocitos de panceta crujientes, langostinos salteados o unos picatostes, según nuestros gustos.
Para hacer esta deliciosa crema que podemos utilizar tanto de entrante como para una cena de plato único, comenzamos pelando y picando bien las zanahorias para que su cocción no se prolongue demasiado. Hacemos lo mismo con el puerro, retirando las capas exteriores y la parte verde, picando el resto.
Pochamos a fuego lento el puerro y las zanahorias, procurando que no se doren. Si no tenemos puerro, podemos hacer la receta con cebolla blanca, pero os recomiendo el puerro porque da un aroma delicioso a esta preparación.
Cuando todo este bien pochado y parezca que los ingredientes van a empezar a tomar color, agregamos una pizca de harina y dejamos que las verduras la envuelvan. Después incorporamos el caldo de verduras, una ramita de tomillo y el arroz y dejamos cocer todo a fuego lento durante unos 30 minutos removiendo de vez en cuando. Podéis volcar el contenido de la sartén a una cazuela alta para facilitar la labor.
Retiramos el tomillo, trituramos con la batidora de mano y pasamos por el colador para obtener una crema de textura muy fina. A continuación afinamos nuestra crema de zanahorias a la Crecy para que quede más cremosa agregando un poco de nata líquida y volviendo a ponerla al fuego. Damos un último hervor y servimos en plato hondo, añadiendo unas gotas extra de nata líquida y la cobertura o decoración que queramos incorporar a la crema.
Con qué acompañar la crema crecy de zanahorias
Podemos decorar la superficie de la crema crecy de zanahorias con unos picatostes, unos brotes o cualquier otro elemento que complemente nuestra crema para que tenga mejor aspecto. Como complemento para el postre, os recomendamos este milhojas sencillo de mango y frambuesa, para redondear un menú delicioso.