La ensalada de pasta griega que sabe a verano y que resuelves en diez minutos es todo lo que tu táper necesita

Hidratos, proteínas y mucha frescura en una receta que sirve como fondo de armario

Ensalada Pasta Griega
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Jaime de las Heras

Editor Senior
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Jaime de las Heras

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Hay veces que uno se pone en modo Zorba, el griego, y casi baila un sirtaki en la cocina cuando se corona con ensalada que sirve receta rápida, barata y completa que se resuelve en diez minutos.

Precisamente lo que puede suceder cuando te pongas manos a la obra para resolver una ensalada de pasta griega, que es la opción ideal para meter proteínas e hidratos de carbono en un mismo plato sin tener que complicarte la vida y, además, dotándola de muchísimo sabor.

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La base de la receta no deja de ser una ensalada de pasta que, además, va a prescindir de salsas que se puedan poner malas por el calor, así que es un buen táper de oficina o, incluso, para llevártelo a la playa o a la piscina.

Lo primero que hay que hacer es cocer la pasta como mande el fabricante. Podéis utilizar macarrones, fusilli, conchas, orechiette o los clásicos codos; lo que prefiráis, pero que sea una pasta corta y seca.

Mientras se cuece, preparad el resto de complementos que vamos a tener para nacionalizar griega a esta ensalada. La base, tan helénica como mediterránea, son tomates (los que queráis); unas aceitunas negras picadas, dejando también algunos trozos en entero, y un buen queso feta.

Por lo demás, si queréis complementarlo con algunas pasas o con alguna hoja verde como la rúcula, perfecto. En este caso, lo único que hay que hacer es picar los tomates en trozos de bocado, igual que el queso, y tenerlo a mano para cuando terminemos de cocer la pasta. También, si queréis más 'verde', podéis saltear unos trozos de berenjena en una sartén aparte. O picar un poco de pepino, bien troceado, e integrarlo.

Cuando esté lista, la escurrimos, la regresamos a la olla donde la hemos cocinado y ahí incorporamos las guarniciones, con un chorro de aceite de oliva virgen extra, un punto de pimienta negra molida y algunas hierbas frescas troceadas (como la menta, la albahaca, el orégano o la hierbabuena), aprovechando que el calor residual de la pasta va a ayudar a emulsionar el aliño y tendremos más que lista nuestra ensalada de pasta griega.

Imágenes | martinrlee en iStock

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