En los bares de Almería no se pide pincho de tortilla, la especialidad es una tapa de desayuno única en España

Si pides una tostada de tortilla de patatas en cualquier otro lugar del país, probablemente te miren raro

Tostada Tortilla
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Liliana Fuchs

Editor

Que no te extrañe si vas a desayunar o de tapeo por Almería y en lugar de un típico pincho recibes la tortilla de patatas con una presentación peculiar. No, no hablamos de moderneces pretenciosas, sino del formato de una de las tapas locales más comunes: la tostada o tosta de tortilla de patatas. Puede sonar muy simple, pero es todo un clásico de bares y cafeterías de la ciudad, un fenómeno que no existe en ningún otro lugar de España.

La preparación básica es sencilla: media barrita de pan tostado, tomate y tortilla. El punto diferencial lo pone, sobre todo, precisamente la tortilla de patatas, cuya elaboración puede variar mucho de un local a otro. Con o sin cebolla, más o menos cuajada, fina o más gruesa... Y también hay lugar para las variaciones en la presentación de la misma, incluso algunos bares fusionan el pincho con la tosta.

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Es el caso de la tostada de El Gato del Cabo, popular cafetería abierta hace seis años en el centro de Almería donde se han ganado una buena fama entre vecinos y turistas gracias a lo que más trabajan, el desayuno y tapeo a media mañana. Sus tortillas son la estrella del local, cuya producción han tenido que ir incrementado progresivamente ante el aumento de la demanda, y que suelen destinar casi siempre a coronar las famosas tostas. La hacen muy, muy jugosa, un punto que se ve poco por aquellos lares, pero que parece convencer a todo el que le hinca el diente.

En el Gato del Cabo la sirven cortada en tres porciones de pincho sobre tomate rallado natural con un chorrito de aceite de oliva virgen extra, aunque, como en otros bares almerienses, se puede pedir también con base de mahonesa, alioli o nada más que aceite. Algunas cafeterías la preparan directamente sobre rodajas de tomate natural. Tomate de Almería, por supuesto.

El formato más habitual de la tostada de tortilla local se recibe con la porción cortada de una pieza, ocupando todo el largo y ancho del pan, del que también se encuentran variantes para todos los gustos: mollete, integral, sin gluten, multicereales, etc. En otros bares de toda la vida, como la Taberna Sol Naciente, también recurren a tres pinchos, pero su tortilla suele ser de las bien cuajadas, estilo más rústico y más del gusto local.

Taberna Taberna Sol Naciente

No faltan tampoco las tostas de tortillas elaboradas con otros ingredientes, como la que preparan de berenjena con ajoblanco en la Taberna Entrefinos, aunque las que más abundan siguen siendo las tortillas clásicas de bares de toda la vida, como La Generala, de cuya cocina suelen salir seis tortillas de patatas al día que se reparten entre tostadas, raciones y tapas, y que es el gran reclamo del local.

Almería tampoco se escapa de la apertura de nuevos bares con pretensiones más gastromodernas que siguen las tendencias más virales, pero es una ciudad en la que todavía tira más el tapeo y las comidas tradicionales de siempre. A menudo con recetas tan simples como el tabernero o el famoso chérigan, pero que, si siguen triunfando, es por méritos propios.

Imágenes | @elgatodelcabo/@mialmeriaesunparaiso/@almeria_de_tapas

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