Aprovechó la coyuntura el chef Dabiz Muñoz, tres estrellas Michelin y galardonado con Best Chef Award, para dejar un consejo durante la pasada gala de The World's Fifty Best, celebrada en Valencia.
El premio, que encumbró al restaurante peruano Central (en Lima), también dejó un podio repleto de españolidad, ofreciendo la segunda posición al restaurante barcelonés Disfrutar y cerrando el escalón con DiverXO, que por primera vez entra en el top tres de esta clasificación.
Antes de la euforia del premio, Dabiz Muñoz ya había empezado bien el día a base de arroces aunque, como se ve en el vídeo que sube a su cuenta de Instagram, no sólo vive de paella valenciana.
Arroz del senyoret, arroz negro, paella de marisco… Las referencias que va descubriendo durante su visita valenciana hacen salivar a más de uno, por muchas estrellas Michelin que tenga, y es que el chef madrileño se rindió a la evidencia de lo que consideró como "el mejor sitio de paellas de Valencia y creo que del mundo".
Palabras mayores, aunque es cierto que Casa Carmela, la arrocería centenaria a la que se refirió, es uno de los templos del arroz. No sólo de Valencia, sino de toda la Comunitat Valenciana, y lo lleva siendo desde 1922, cuando abrió sus puertas por primera vez.
Situado casi a pie de playa a las afueras de Valencia, Casa Carmela lleva un siglo haciendo historia con sus arroces donde el primer secreto —si es que se puede calificar secreto— es que todos los arroces que aquí se gestan se elaboran con leña de naranjo.
A partir de ahí, poco talibanismo en un restaurante al lado de la playa de La Malvarrosa, pues las especialidades son eminentemente de arroces de marisco o de pescado. De hecho, también presumen de que sus fondos se hacen siempre con rape, sepia y calamar.
Tras eso, el cielo, incluyendo carabineros, bogavante, langosta, cigalas o la propia tinta del calamar para el arroz negro. Aun así, los puristas también tienen cabida porque elaboran paella valenciana —por encargo—, además de arroz de verduras y también varias fideuás, que se fraguan bajo los mandos de Toni Novo, el miembro de la cuarta generación de una familia que se consagra desde 1922 a los arroces.
Sin embargo, no sólo de arroces vive Casa Carmela, sino también de una carta cada vez más abundante de pescados y mariscos frescos, especialmente crustáceos y moluscos, que lo convierten en uno de los restaurantes más demandados de la costa valenciana. Como será el mérito del restaurante que incluso cierran unos días en verano para reponer fuerzas cuando el sentido común —y la facturación— dirían de no bajar la persiana en el mes de julio.
Imágenes | Miguel Ayuso / Casa Carmela
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