Se me ocurren pocas combinaciones de sabores tan deliciosas como la formada por el chocolate y la naranja. Una forma exquisita de probar si os gusta es remojando gajos de naranja en chocolate fundido, pero si lo que queréis es un pastel espectacular, entonces no os perdáis cómo hacer este bizcocho de naranja y chocolate. ¡Os conquistará!
Aunque parezca un poco elaborado, con un poco de organización el trabajo se hace muy llevadero. Por eso, os aconsejo preparar los bizcochos y el almíbar la noche anterior, dejarlos reposar toda la noche, y por la mañana montar el pastel. Hacedme caso, habréis probado pocos dulces tan melosos y delicados como este. Y si tenéis más prisa, podéis animaros con el bizcocho facilísimo de naranja de toda la vida y santas pascuas.
Empezamos preparando los bizcochos. Ponemos la mantequilla, el azúcar, la sal y la ralladura de naranja en un bol y los batimos juntos hasta que la preparación blanquee y esté esponjosa. Batimos ligeramente los huevos en otro bol y los agregamos poco a poco a la mezcla de mantequilla sin dejar de batir con rapidez.
Si la preparación empezara a separarse, dejamos de añadir huevo e incorporamos batiendo dos o tres cucharadas de harina. Esto hará que la masa quede ligada. Una vez añadido todo el huevo, cernimos la harina por encima y removemos ligeramente con una espátula. Esto asegura que el bizcocho se mantenga ligero y esponjoso.
Dividimos la masa entre tres moldes engrasados de 20 cm y los cocemos a horno precalentado a 180ºC de 15 a 20 minutos, o hasta que pinchando con un palillo éste salga limpio. Los sacamos del horno, los dejamos reposar unos minutos y pincelamos su superficie con el almíbar mientras aún están calientes, así se absorbe más rápidamente. Una vez tibios, retiramos los bizcochos de los moldes y los dejamos enfriar.
Después los envolvemos en papel film y dejamos reposar toda la noche a temperatura ambiente, de esta forma se mantendrán jugosos y tendrán la textura perfecta para pulirlos y rellenarlos. Si se recortan después de cocerlos tienden a desmenuzar o incluso romperse.
Mientras se cuecen los bizcochos preparamos el almíbar para remojarlos. Ponemos el zumo de las naranjas y el azúcar en un cazo y lo llevamos a ebullición. Cocemos a fuego lento hasta que el azúcar se haya disuelto bien. Dejamos enfriar ligeramente, añadimos el licor de naranja y reservamos hasta el momento de usarlo.
Para hacer la ganache, vertemos la crema de leche en un cazo y la calentamos lentamente al fuego. Ponemos el chocolate en un bol y añadimos por encima la crema caliente. Removemos suavemente con una batidora de varillas o una espátula hasta que el chocolate se haya fundido. Agregamos la glucosa, removemos y dejamos que la ganache cuaje hasta que adquiera una consistencia mantecosa.
Para montar el pastel, pulimos los bizcochos y unimos las tres capas usando ganache para la primera capa y mermelada de naranja para la segunda. Usamos el resto de ganache para recubrir la superficie y los lados del pastel. La ganache debe verterse caliente sobre el pastel y luego se deja enfriar hasta que cuaje. Decorar al gusto, en mi caso con perlitas de caramelo.
Con qué acompañar el bizcocho de naranja y chocolate
Si seguís paso a paso las indicaciones sobre cómo preparar bizcocho de naranja y chocolate no tendréis ningún problema para conseguir un resultado perfecto. Guardadlo en la nevera para que quede firme, aunque os aconsejo sacarlo media hora a temperatura ambiente para que los sabores pueden apreciarse mejor.
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