La cuajada de Carnaval es un dulce local, muy querido en la ciudad de Granada, pero apenas conocido más allá de los dominios de la Alhambra.
Lo característico del postre, que nada tiene que ver con lo que en el resto de España se conoce como cuajada, es que, aunque es típico de carnaval, se elabora utilizando polvorones, nevaditos o mantecados sobrantes de las fiestas navideñas. Un recurso ideal para darle una nueva vida a estos dulces que pasado Reyes nadie quiere.
La cuajada de carnaval es un postre frío, que se monta por capas. Lo más tradicional es hacerlo en un cuenco de cerámica granadina con forma de lebrillo y decorado con la flor de Granada. Pero incluso en la ciudad andaluza se simplifica el asunto en ocasiones: se puede hacer en un molde de tarta, en un bol normal y corriente e, incluso, en formato individual.
Lo único que hay que cocinar realmente es la crema pastelera y, si estamos muy ociosos el cabello de ángel, pero lo habitual es comprar este y el resto de ingredientes y limitarnos a montar la cuajada por capas, como os explicamos a continuación.
Antes que nada, vamos a preparar la crema pastelera. Lo puedes hacer como toda la vida en una olla o, mucho más fácil, siguiendo nuestra receta de crema pastelera en el microondas. Para ello solo necesitamos echar los ingredientes de la crema en un vaso de batidora y mezclarlos bien hasta que se hayan integrado y no queden grumos. Lo pasamos a un recipiente apto para microondas y lo cocinamos tres minutos a 800 w de potencia. Abrimos, removemos con una cuchara de madera y volvemos a poner dos minutos a la misma potencia. Si vemos que ya está bien cocinada solo tenemos que remover bien para que se integre del todo y coja cremosidad y meterla en la nevera para que se enfríe.
Mientras la crema se enfría en la nevera, vamos a preparar el resto de la cuajada. Lo primero que vamos a hacer es machacar los polvorones (lo puedes hacer directamente con la mano en su propio papel). Reservamos 100 g y usamos los otros 300 para cubrir la base del bol en el que vamos a preparar la cuajada. A continuación extendemos una capa de crema pastelera, espolvoreamos la almendra crocanti (podéis comprarla ya hecha o, tostar unas almendras y machacarlas y tostarlas vosotros), ponemos encima una capa de cabello de ángel y, encima, una de bizcochos de soletilla remojados en leche y ron.
Repetimos la operación y finalizamos con la capa de los 100 gramos de polvorones que habíamos reservado. Entonces, espolvoreamos todo con canela en polvo y, con ayuda de una plantilla que hemos hecho con el símbolo de la ciudad de granada, espolvoreamos el azúcar glas.
Con qué acompañar la cuajada de carnaval
Ni que decir tiene a la vista de estos ingredientes que la cuajada de carnaval es una bomba calórica que no debemos consumir en exceso. Es un postre de cuchara que va bien, en cantidades pequeñas, para terminar una comida, antes del café o, si acaso, un licorcito que baje tamaña bestialidad.
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