En mi casa se llamaban habichuelas y quien las bordaba era mi abuela, convertidas en puré cuando éramos más pequeños y después como sabroso plato de cuchara completamente vegano, sin que ella llegara a usar nunca esa palabra. Dando por imposible el conseguir replicar su receta mágica, es tentador aventurarse con elaboraciones de alubias blancas como esta con queso, que nos suenan algo extrañas, pero que también están ligadas a recuerdos familiares y hogareños.
Es un plato que no tiene más misterio del que ya anuncia su nombre: alubias con queso. Es una receta publicada en Taste de Illyanna Maisonet, autora de Diasporican, donde recoge y comparte platos, recetas, sabores y recuerdos de la cocina familiar de su casa puertorriqueña, trasladando sobre todo ese saber popular de su madre y su abuela.
Y sin duda este guiso de judías blancas transmite se confort hogareño, delicioso y nutritivo en su simplicidad. Maisonet indica que en su casa se usaban normalmente judías tipo pintas, canela, o riñón, pero sugiere usar cualquier otra variedad, como las versátiles blancas, mejor de tamaño pequeño o mediano. El queso que recomienda es tipo Monterey Jack o queso Oaxaca, y realmente podemos escoger el que tengamos a mano y nos guste, que sea fundente y sin curación, tipo de hebra como la mozzarella.
Maisonet además usa más ajo -lo hemos reducido un poco- y usa las alubias secas directamente para cocerlas sin más; así pueden tardar hasta 6 horas en estar tiernas, pero si las dejamos a remojo el tiempo se acorta considerablemente.
La noche antes, lavar las alubias y poner a remojo con abundante agua fría, al menos seis horas. Enjuagar y escurrir bien, y disponer en una olla grande, cubriendo con más agua, al menos unos 5 cm por encima de la legumbre.
Añadir la cebolla cortada por la mitad transversal y sin la piel; aplastar los ajos con un cuchillo grande, pelar y echar también a la olla. Llevar al fuego y calentar hasta que entre en ebullición.
Cuando hierva, mantener el hervor unos 5-10 minutos. Bajar el fuego para dejar a ritmo de chup-chup suave, sin tapar, y cocer hasta que las alubias estén tiernas, entre 1-4 horas según la variedad y el tiempo de remojo, o más si no las hemos remojado.
Comprobar de vez en cuando el nivel de líquido y remover suavemente cada media hora. Cuando estén al gusto, añadir el queso rallado, salpimentar y servir.
Diasporican: A Puerto Rican Cookbook
Con qué acompañar las alubias blancas con queso
Este guiso puertorriqueño de alubias blancas con queso es bien saciante y rico en proteínas a pesar de su simplicidad; podemos darle un toque español sirviéndolas con un poco de buen aceite de oliva virgen extra, piparras u otros encurtidos y pan integral para acompañar. Una ración generosa es una comida más que satisfactoria.
La autora nos sugiere aprovechar las sobras para freír unos chorizos mexicanos, incorporar las alubias con algo del líquido y cocinarlo todo junto machando la mezcla para rellenar tortillas de trigo y tomarlas con huevos fritos.
En DAP | Alubias blancas con verduras
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