La escena es sencilla de imaginar: una esquina iluminada, un grupo de personas con cara de haber vivido una noche larga, y un plato humeante de lasaña recién salida del horno. No es París ni Nueva York, es Barcelona, y más concretamente el restaurante Simultáneo abierto las 24 horas del día. En una ciudad donde la cocina cierra antes que los ojos, encontrar un sitio así es casi un pequeño milagro urbano.
Mientras el resto de locales bajan la persiana, este lugar mantiene su ritmo constante. No hay DJ, no hay cócteles exóticos ni una carta pretenciosa. Lo que hay es una carta de clásicos que sabe mejor cuando el reloj marca las 4 horas y el cuerpo no entiende si es cena o desayuno.
El restaurante está ubicado en una de esas zonas nodo de la ciudad, en plaza España, y el hambre aparece de improviso. Su carta no pretende reinventar la gastronomía catalana, pero su disponibilidad permanente lo han convertido en un imán para taxistas, sanitarios, estudiantes, turistas con jet lag y noctámbulos empedernidos.
Dos posibilidades
La propuesta es clara: una línea de platos de brunch, con huevos rotos, tortillas y huevos benedictinos (para quienes se acercan más bien a desayunar), y otra división de platos de empanzurrarse.
Esto es: hamburguesas con patatas, pizzas clásicas y una lasaña que ya se ha ganado una legión de fieles. No hay florituras, pero sí una cocina que no pregunta la hora.
Vivir a destiempo
Lo más llamativo es su horario: 24 horas seguidas, siete días a la semana. En una ciudad donde incluso las churrerías tienen horarios limitados, la apuesta es valiente. Simultáneo se ha convertido en un pequeño faro gastronómico para quienes viven a destiempo.
Como en esta clase de restaurantes, el ambiente es una mezcla curiosa: mesas compartidas entre personas que vienen de fiesta y otras que van a trabajar. La convivencia entre mundos cruzados tiene algo de mágico. Se escucha tanto inglés como catalán, risas discretas y algún bostezo sonoro.
En redes sociales, el restaurante se ha vuelto un pequeño fenómeno. Hay vídeos de turistas sorprendidos por poder pedir un plato caliente a horas insólitas y comentarios que comparan la experiencia con la de diner americano, pero con encanto mediterráneo.
Más allá del morbo de poder comer a medianoche, hay una lectura urbana interesante: Simultáneo responde a una necesidad real en una ciudad viva, donde no todo el mundo duerme a la misma hora. Un espacio así habla tanto de gastronomía como de ritmos modernos.
Simultáneo
- Dirección: Plaza España, 6 (Barcelona)
- Teléfono: 934 26 26 00
- Precio: 30 €
- Horario: De lunes a domingo, abierto 24 horas.
Foto | Simultáneo/Instagram