Al ver el nombre de la receta de hoy, ya os habréis dado cuenta que este bizcocho le vamos a hacer bocabajo, para luego presentarlo dándole la vuelta, como las tradicionales tartas tatin francesas. Y es que esta receta sencilla de bizcocho tatin de piña se hace, efectivamente, comenzando por la cobertura y terminando con la base.
Pero en lugar de poner sobre la fruta una crema y una placa de hojaldre o de pasta quebrada como en las tartas tatin, aquí hemos puesto encima una masa clásica de bizcocho. El resultado tiene un bonito aspecto, que hará más apetecibles vuestros desayunos que muchas veces no atendemos como deberíamos, por lo que espero que la receta os venga bien.
Comenzamos poniendo un poco de caramelo en la base de un molde de tartas. Yo usé uno de 24 cm de diámetro desmoldable, para que el bizcocho suba y tenga cierta altura. El caramelo podéis hacerlo calentando azúcar en un cazo, teniendo cuidado de no quemaros, o usar caramelo ya preparado. Sobre el caramelo acomodamos 7 rodajas de piña, y la octava la cortamos para rellenar los huecos.
En un bol batimos los huevos con el azúcar y cuando blanquee y esté espumoso, añadimos la harina y la levadura, integrando bien. Utilizaremos como medida un vasito de yogur, o calculamos 125 ml por medida. Incorporamos seguidamente el aceite, la leche y el zumo de piña y seguimos batiendo con las varillas, hasta que los ingredientes de la masa estén bien integrados.
El resultado debe ser una masa de bizcocho algo espesa como veis en las imágenes. Si os apetece, antes de volcar el bizcocho sobre las piñas que están en el molde, podéis rellenar los agujeros de las piñas con cerezas, fresas y darle así un toque de color.
Una vez cubierta la fruta con el bizcocho, horneamos a 180ºC durante unos 40 minutos aproximadamente, dependiendo de cada horno. Lo mejor para comprobar que está en su punto es introducir una brocheta de madera o una aguja de hacer punto y comprobar que sale limpia. Dejamos enfriar antes de desmoldar, dando la vuelta a nuestro bizcocho tatin para presentarlo con la fruta en la parte de arriba.
Con qué acompañar el bizcocho tatin de piña
Tanto para desayuno como para merienda, esta receta sencilla de bizcocho tatin de piña os vendrá muy bien. La textura del bizcocho, crujiente por fuera y algo húmedo por dentro os gustará seguro. Mi mujer y mi hijo prefieren tomarlo con leche fría, yo acompañando un café caliente. Y a vosotros, ¿cómo os apetece?
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