En materia dulce, ante la duda, los clásicos no fallan. Por eso entre los tipos de galletas son las más simples de de mantequilla suelen ser las favoritas de millones de personas, aunque creamos que el chocolate o las coberturas pintorescas sean más llamativas. Ya sean pastas de té, las típicas galletas danesas de la caja azul o unas suculentas shortbread escocesas, la combinación de buena mantequilla y azúcar es infalible.
Era inevitable caer en la tentación de probar una receta en esta línea cuyo nombre no parece tan conocido como otras pastas, las llamadas soleils, galletas de mantequilla de París. Los macarons tendrán más fama como dulce chic -pido disculpas por usar ese término-, pero, donde se ponga una buena galleta de mantequilla sin más, con ingredientes de calidad, que se quiten los empalagosos macarons de colores.
Estas soleils tienen la ventaja añadida de que son sencillísimas de preparar, podemos aromatizarlas solo con limón o solo vainilla -o probar otros aromas, como azahar- y, según el grosor que les demos, saldrán más crujientes o más suaves. Insisto: a mayor calidad de la mantequilla, más deliciosas.
Combinar el azúcar con la ralladura fina de limón y frotar hasta liberar sus aceites y aromatizarlo. En un recipiente hondo batir la mantequilla blanda con unas varillas manuales o eléctricas hasta que quede cremosa. Agregar el azúcar y batir más hasta que se incorpore del todo y tenga textura algo esponjosa.
Echar el huevo y la vainilla y batir un poco más. Tamizar encima la harina con la sal y combinar a velocidad suave hasta tener una masa más o menos homogénea. Puede ser más fácil trabajarla al final a mano. Dividir en dos, aplanar compactando y envolver cada una en plástico film. Enfriar en la nevera mínimo 30 minutos.
Precalentar el horno a 180 ºC con aire o 200 ºC con calor arriba y abajo y preparar dos bandejas. Estirar la masa, entre láminas antiadherentes si se pega al rodillo, hasta dejar un grosor de unos 3-5 mm, según se prefieran galletas más crujientes o más suaves. Colocar en las bandejas y seguir trabajando la masa hasta terminar.
Si se ha reblandecido mucho la masa porque hace calor, enfriar unos 15 minutos en la nevera. Pintar con la yema de huevo batida y cocer en el horno hasta que estén doradas, vigilando que no se quemen, unos 8-10 minutos.
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Con qué acompañar las galletas soleils
Son unas galletas perfectas para la sobremesa o la merienda, acompañando un café, té o infusión al gusto. También podemos tomarlas simplemente con un vaso de leche o bebida vegetal, o una horchata de almendras fresquita cuando haga más calor.
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