¿Andas sufriendo porque quieres comer sano y tradicional pero no tienes tiempo? ¿Aborreces el uso de las acelgas, acusándolas de sosas? ¿Crees que no hay más maneras de comer el arroz en Valencia aparte de en paella?
Si tras este breve cuestionario la mayoría de tus respuestas son un 'sí', déjanos abrirte los ojos a una receta tradicional de la cocina valenciana en la que el arroz es protagonista, haciéndose amigo de las acelgas y, al mismo tiempo, ofreciendo un platazo sabroso y fácil que puedes resolver en media hora.
Vamos, la receta que ni David Copperfield, con toda su magia, habría conseguido emular. Lo bueno es que aquí no hay trucos si hablamos del arroz con acelgas valenciano o arròs amb bledes, que es un plato tan barato como típico que te permite salir del paso cualquier día.
Misterio no tiene ninguno, más allá de hacer un sofrito majo a base de cebolla y ajo, añadiendo también un poquito de salsa de tomate y algunas especias como el pimentón dulce o un poco de pulpa de pimiento choricero. También lo puedes hacer con ñoras, que el resultado va a ser igual de agradable.
Lo que sí es conveniente es que este arroz con acelgas lo marches con un caldo de verduras. ¿Se puede hacer con agua? Pues sí, evidentemente, pero no va a tener tanta gracia ni tanto sabor. Además, hacer un caldo de verduras no nos exige ni mucho dinero ni mucho tiempo, pues puedes aprovechar los restos de pieles de hortalizas como zanahorias, nabo, apio o puerro para ponerlo en marcha.
Más allá de eso, ningún esfuerzo extra. Marchas el sofrito, cocinas ligeramente el arroz y añades tres veces la cantidad de caldo en función de la cantidad de arroz. Mejor un grano redondo, claro, como el arroz bomba. Así tendrás un arroz que deba quedar meloso —ni seco ni caldoso— y con el que reconciliarte con Valencia, con las acelgas y dejar a tu monedero más tranquilo de lo que pensabas.
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