En invierno el cuerpo pide guisos y estofados, y el pollo es una carne humilde que rinde de maravilla para estos menesteres. En realidad en casa se come este ave guisada todo el año, pero hay que reconocer que un plato humeante como el de esta ocasión, a la sidra con setas y especias apetece mucho más cuando bajan las temperaturas.
Podemos hacer la versión económica y accesible todo el año, usando champiñones blancos, portobello o mezcla -como en nuestro caso-, o recurrir a las setas de temporada que encontremos según la época o donde vivamos. Otra buena alternativa son las setas congeladas y, mejor aún, las deshidratadas. En lugar de zanahoria podemos usar calabaza o boniato, o añadir un poco de apio, puerro, etc.
Lavar bien y secar las setas o champiñones, troceándolas según la variedad en piezas más grandes de un bocado. Lavar y pelar las zanahorias, trocear en piezas algo más pequeñas y picar los ajos pelados.
Calentar un chorrito de aceite en una sartén amplia y comenzar cocinando las zanahorias, salteándolas unos cinco minutos. Añadir las setas subiendo el fuego, salpimentar y agregar una pizca de comino y tomillo. Cocinar el conjunto hasta que las setas liberen su agua y después se evapore; retirar a una olla o cazuela.
Añadir un poco más de aceite a la misma sartén; salpimentar el pollo por todas partes y sazonar con comino, canela, nuez moscada, clavo y pimentón, una pizca al gusto de cada. Dorar a fuego medio en la sartén por ambas caras y retirar a la cazuela con las verduras.
Desglasar la sartén añadiendo la sidra y la hoja de laurel, subiendo el fuego y frotando bien el fondo con una espátula para sacar toda la sustancia que haya dejado el pollo. Cuando se haya evaporado un poco el alcohol, añadir la nata líquida, bajar el fuego y reducir removiendo un minuto.
Añadir toda esta salsa a la cazuela y un poco más de especias al gusto, agregando un poco más de sidra, agua o caldo si se hubiera quedado muy reducido, remover bien y cocinar tapado a fuego lento unos 30-40 minutos, hasta que el pollo esté bien tierno.
Con qué acompañar el pollo a la sidra con setas
Un sencillo arroz blanco cocido será la guarnición perfecta si queremos enriquecer un poco el plato, preparado al microondas, o con la receta de arroz blanco olla expres, o bien a lo tradicional con arroz blanco clásico; también podemos optar por arroz integral o sustituirlo por quinoa, si nos apetecen más nutrientes. Aunque la idea es acompañar el pollo a la sidra con una buena cantidad de salsa con setas y verdura, así que simplemente con buen pan tendremos más que suficiente.
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