Quizá no sea un formato de pasta muy habitual para preparar ensaladas, pero los tortellini rellenos ofrecen una variante original y muy sabrosa para sorprender con un plato diferente, y desde luego más saciante. Perfecta para llevar y comer en el trabajo, o para tener lista al llegar a casa, esta ensalada con aliño cremoso de yogur se adapta a cualquier época.
El relleno puede ser de lo que más nos guste, por ejemplo de carne o quesos, si bien recomiendo optar por algo suave y no demasiado pesado, que no rompa con la frescura del resto del plato. Obviamente nos saldrá más rica si usamos pasta artesanal, mejor aún casera, pero puesto que elaborar tortellini a mano no es tarea sencilla -ni rápida-, tenemos más que permitido recurrir a un producto comercial de calidad decente.
Cocer los tortellini en abundante agua salada siguiendo las instrucciones del paquete para dejarla bien al dente, y escurrir con mucha suavidad, enjuagándola con agua fría, para no romperlos. Conservar parte del agua de cocción y añadir a la pasta un poco de aceite de oliva y extender en una bandeja mientras terminamos el resto de ingredientes.
Lavar y secar las verduras; desechar tallos, semillas y posibles partes dañadas y picar todo en cubos pequeños, cortando los tomates en cuartos. Cortar las aceitunas escurridas, sin hueso, en rodajas, y picar las hierbas frescas previamente lavadas y secas. Añadir a los tortellini ya fríos en un recipiente grande.
Mezclar aparte el yogur con el queso de cabra desmenuzado, el limón, el ajo granulado, la mayonesa y el vinagre. Salpimentar y mezclar. Agregar un poco de agua de la pasta si estuviera demasiado espeso, o un chorrito de aceite de oliva. Seguir mezclando y probando hasta dar con el punto deseado.
Verter sobre la pasta con la verdura y mezclar con suavidad. Si nos parece que falta algún ingrediente, añadir al gusto lo que nos apetezca. Hay que tener en cuenta que tras el reposo en la nevera la salsa perderá fluidez, por lo que nos interesa no quedarnos cortos de aliño. Reservar en frío hasta el momento de servir.
Con qué acompañar la ensalada de tortellini
Si servimos buenas raciones de esta ensalada de tortellino con aliño de yogur tendremos un plato más que completo y saciante, bien nutritivo pero no muy pesado, estupendo para tomar en el almuerzo. Podría ser también un primer plato en un reparto más comedido, completando el menú con alguna proteína ligera de segundo. No es aconsejable añadir pan a la mesa porque ya tenemos una buena porción de hidratos, y lo mejor es la fruta para el postre.