Fáciles, originales y muy tradicionales, así son estas tortas de aceite, que podéis hacer en casa con la receta que os traemos y que os trasladarán a Castilleja de la Cuesta (Sevilla), el municipio donde se elaboran las famosas tortas de aceite Inés Rosales.
La receta no tiene mucho misterio en esta preparación a caballo entre el pan y el dulce, y que en otras partes de España también se elaboran de manera similar, como es el caso de la torta de Aranda (en Burgos) y cuya clave es que la masa tenga ese puntillo de anís que las hace inconfundibles.
Crujientes, suaves y perfectas para tomar solas o, si quisiéramos, con algún añadido como el azúcar espolvoreado, una pizca de almendra molida o un poco de membrillo, son magníficas para desayunos y para meriendas.
Cuentan con la ventaja también de ser realmente fáciles de hacer, pues la fermentación es bastante corta, así que tenemos una nueva candidata a hacer la competencia a nuestros postres, tartas, bizcochos y pasteles más habituales.
En un recipiente pequeño ponemos el aceite, la ralladura de limón, el anís en grano y calentamos al microondas 45 segundos, para que se caliente el aceite y se infusionen los sabores pero no llegue a freírse.
En un bol ponemos la harina tamizada y en un recipiente disolvemos la levadura en agua tibia, una vez disuelta añadimos el licor de anís, el aceite infusionado con la ralladura y el anís en grano, el azúcar, la pizca de sal y el sésamo y lo mezclamos todo bien.
Hacemos un volcán en la harina, añadimos todos los líquidos, mezclamos todo bien con una espátula incorporando la harina durante cinco minutos. Pasados los cinco minutos sacamos la masa del bol y la trabajamos cinco minutos mas amasando sobre la encimera, formamos una bola, la devolvemos al bol, la tapamos con un trapo y la dejamos fermentar en un sitio templado hasta que doble su volumen.
Cuando doble en volumen hacemos bolas de unos 50 gramos (nos deben salir unas 15 bolas) y espolvoreamos con azúcar la encimera, ponemos las bolas una a una, estirándolas con un rodillo sobre el azúcar hasta que queden finas.
Las pasamos a una bandeja de horno con papel sulfurizado dejando el lado que estaba en contacto con la mesa hacia arriba para espolvorearle un poco mas de azúcar y horneamos a 230 ºC durante seis u ocho minutos.
Pasado ese tiempo las sacamos del horno y dejamos atemperar ligeramente antes de consumir.
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Con qué acompañar las tortas de aceite al estilo Inés Rosales
Receta perfecta para acompañar de un aperitivo fácil o de una ensalada; de una crema de verduras o de una sopa con verduras para el primer plato, y para servir de segundo plato un poco de pescado al horno, un pescado a la plancha o una pechuga de pollo y, como cierre, este postre fácil y rápido.
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