El pan de plátano o banana bread es uno de los grandes clásicos de la repostería americana del que tenemos varias versiones como la [receta tradicional, la integral con semillas o la que incorpora chocolate, entre otras. Hoy sumamos una nueva propuesta, la más saludable de todas: el pan de plátano fitness.
Una delicia que supera, con creces, a cualquier otra receta que hayamos probado hasta la fecha. Libre de azúcar y grasas, en su elaboración hemos usado harina y copos de avena, estevia (de la que se puede prescindir perfectamente), canela y vainilla para dar sabor y nueces para aportar textura. Es jugoso, sabroso y muy natural. ¿Quién se anima a preparar el pan de plátano fitness?
Pelamos los plátanos (cuanto más maduros, mejor) y machacamos con un tenedor. Agregamos harina de avena y los copos, las nueces picadas, el huevo, la levadura de cerveza, la esencia de vainilla, la canela y la estevia (opcional). Mezclamos hasta homogeneizar. Si la masa obtenida queda demasiado espesa, añadimos un poco de leche.
Batimos las claras a punto de nieve y las incorporamos a la masa anterior, poco a poco y con movimientos envolventes y suaves para que el aire no se pierda y logremos un pan esponjoso. Cortamos el plátano en su punto a lo largo, en dos mitades. Espolvoreamos la parte plana con un poco de harina y colocamos sobre la masa (con la parte enharinada hacia abajo -con esto conseguimos que se mantenga en la superficie-).
Forramos un molde de cake (alargado) con papel de horno y rellenamos con la masa. Cocemos en el horno, precalentado a 180° C, durante unos 40-45 minutos o hasta que al introducir un cuchillo éste salga limpio y seco.
Con qué acompañar el pan de plátano fitness
Al pan de plátano fitness le sienta de maravilla un vaso de leche fresca, una horchata, un smoothie o cualquier bebida de nuestro gusto. Es perfecto para servir como desayuno, merienda o, incluso, postre. Su miga es jugosa, esponjosa y las nueces le aportar un toque de textura soberbio.