Seguro que muchos recordáis aquellos gajos de naranja bañados en chocolate, es por eso nos entenderéis que este bizcocho glaseado de naranja y pepitas de chocolate nos trae buenos recuerdos y lo repitamos y lo repitamos como un clásico para desayunar.
La mezcla de esta fruta con cacao siempre ha sido muy resultona, pero si además le añadimos un glaseado preparado con zumo de naranja para darle más jugosidad si cabe, entonces este cake ya se transforma en toda una tentación dulce.
Comenzaremos rallando la corteza de la naranja y mezclando las ralladuras con el azúcar para que este se impregne bien del aroma. En un cacito derretimos la mantequilla y la dejamos templar de nuevo sin que llegue a ponerse sólida. Precalentamos el horno a 200 grados C con calor arriba y abajo y engrasamos y enharinamos el molde.
Ir haciendo el glaseado, para ello echar el zumo, el azúcar y el agua en un cacito y sin remover cocer durante diez minutos. Dejar enfriar.
En un bol o en el vaso de una batidora de varillas batimos los huevos con el azúcar hasta que estén blanquecinos y hayan doblado su volumen, añadimos la nata líquida y después la harina junto con la levadura química y la sal. Remover suavemente para integrar los ingredientes.
Añadir finalmente la mantequilla derretida y las pepitas de chocolate. Remover y verter en el molde. Hornear durante cinco minutos a 200 grados C y bajar la temperatura a 160 durante cincuenta minutos más o hasta que al pinchar con una brocheta esta salga limpia. Pincelar el bizcocho con el glaseado a temperatura ambiente y decorar con unos gajos de naranja confitada.
Con qué acompañar el bizcocho glaseado de naranja y pepitas de chocolate
El bizcocho glaseado de naranja y pepitas de chocolate, es una preparación muy tierna ideal para desayunar o tomar un café a media tarde. Podéis suprimir el glaseado pues seguirá siendo un bizcocho muy suave y delicado, y sobre todo lleno de aroma que le aporta la cáscara de naranja en su interior.