Entre las plantaciones de mi pequeño huerto destacan los tomates cherry, que ya me avisaron en la tienda que se convertían en una especie de “plaga” por lo rápido que crecen. Para dar salida a tanta producción nada mejor que esta confitura de tomates cherry a la vainilla, toda una delicatessen que encontraríais en una tienda gourmet y que podéis preparar en casa fácilmente y en poco más de media hora.
Como para toda conserva tendréis que tener preparados unos botes de cristal bien limpios y secos para envasarla. Yo como era la primera vez que la hacía en casa he hecho poca cantidad, pero si os gusta, nada más sencillo que ir doblando los ingredientes. En el caso de esta variedad de tomatitos que tienen mucha piel y pepitas, os recomiendo pasarla por un chino o un pasapurés para libraros fácilmente de ellas y que os quede una confitura lisa, brillante y sin tropezones. Ahora si os apetece encontrar pequeños trozos, saltaros este paso y envasar directamente cuando acabe el tiempo de cocción.
Comenzar lavando y secando los tomates cherry, seguidamente quitarles el rabito y reservarlos en un bol. En una cacerola mezclar el azúcar con el agua, remover y poner la olla a fuego medio a hervir. Se irá formando una especie de jarabe, se sabrá que se ha acabado de hacer cuando midiendo con un termómetro de cocina este alcance una temperatura de unos 116ºC. Si no tenéis termómetro será cuando añadiendo una gota del jarabe en un vaso con agua fría, este forme una bolita maleable.
Añadir al almíbar los tomates cherry enteros, la vaina de vainilla abierta longitudinalmente con un corte, una pizca de sal, el zumo de limón y su corteza, sin parte blanca. Cocer durante unos 40 minutos. Pasar la confitura por el chino si se quiere sin piel ni pepitas.
Envasarla en caliente en los botes herméticos llenándolos hasta arriba, cerrarlos y dejarlos enfriar dados la vuelta con la tapa hacia abajo. Si no los vais a consumir rápido, cocer los botes al baño maría durante 30 minutos para esterilizarlos.
Con qué acompañar la confitura
Esta confitura de tomates cherry a la vainilla resulta magnífica para untar en unas tostas y añadirles unas lonchas de jamón serrano por encima, aquí el contraste dulce y salado queda perfecto. Pero también la encuentro ideal para acompañar una tabla de quesos o unos panecillos al desayuno, y es exquisita combinada con un queso cremoso de untar.
En Directo al Paladar | Confitura de higos y nueces especiada, receta para alegrar los desayunos
En Directo al Paladar | Cómo hacer mermelada casera de melocotón, receta sencilla y básica para alegrar desayunos y meriendas