Encontré ayer esta receta de crema de leche y vainilla, en una revista que rondaba por casa desde hace muchísimo tiempo y que casi no había hojeado, me sirvió estupendamente para aprovechar la leche condensada que todavía me quedaba de la receta del mes pasado y, que se estaba empezando a quedar muy seca.
Después de probarla fría, en copa y con cuchara, y gracias a su riquísimo sabor y a esa textura espumosa, se me han ocurrido un montón más de posibilidad donde utilizarla, y voy a tener que hacerlas todas pronto, ya que a esta crema sí se le aprecia el sabor de la leche condensada y, a mi familia tengo que engañarla para que se la coman sin protestar.
Los ingredientes
400 gramos de leche condensada, 200 ml de nata para montar, 2 claras de huevo, 2 vainas de vainilla.
La preparación de la crema de leche y vainilla
En un cazo ponemos la leche condensada y la nata. Abrimos las vainas de vainilla por la mitad, a lo largo, con un cuchillo afilado y raspamos las semillas del interior y las echamos también en el cazo. Ponemos el cazo a fuego muy, muy lento y lo dejamos hervir durante unos 20 minutos removiendo constantemente para evitar que se queme.
Cuando retiremos del fuego la pasamos por un colador y la dejamos enfriar a temperatura ambiente. Mientras montamos las claras a punto de nieve. Que incorporaremos a la crema mezclándola con suavidad para evitar que bajen las claras y conseguir que la crema tenga una textura espumosa. La dejamos enfriar en la nevera tapándola con film transparente.
Tiempo de preparación | 15 minutos Tiempo de cocción | 20 minutos Dificultad | Baja
La degustación
La crema de leche y vainilla la podemos tomar en un vaso o copa, una vez que haya enfriado.
También puede ser un fondo ideal para un postre de macedonia de frutas, o la "sabana" caliente sobre una bola de helado de chocolate, entre otras muchas posibilidades.
En Directo al Paladar | Receta de fresones y naranja con crema de mascarpone En Directo al Paladar | Leche condensada. Receta