Tenía que terminar el año publicando una receta dulce, ¡cómo no! Para que sea especial de estas Fiestas, y podáis aprovechar los excedentes que os queden, he hecho unas galletas de turrón que están deliciosas, ya lo veréis.
La fórmula la tenía fichada desde el año pasado cuando la publicó Clemenvilla, de Bocados de Cielo, pero no ha sido hasta ahora cuando me he propuesto hacerla. Craso error, ¡son deliciosas, no tardéis tanto!
Trituramos el turrón con el huevo hasta formar una crema. Reservamos. Mezclamos la mantequilla con el azúcar hasta formar una crema. Agregamos la crema de turrón y la harina hasta que tengamos una masa blanda. Formamos una bola aplanada, la envolvemos en film transparente y dejamos reposar en la nevera durante un par de horas, o bien en el congelador durante unos 15 o 20 minutos como máximo.
Calentamos el horno a 175º con calor arriba abajo sin aire. Estiramos la masa con un rodillo hasta dejarla con unos 5 mm de espesor. Con ayuda de un cortapastas con la forma deseada cortamos las galletas y las colocamos en una bandeja de horno.
Horneamos durante 12-15 minutos, hasta que la base esté ligeramente dorada. Sacamos del horno, dejamos en la bandeja durante cinco minutos más y esperamos a que se enfríen las galletas en una rejilla.
Con qué acompañar las galletas de turrón
Siempre os digo lo mismo: las galletas hay que preservarlas de la humedad y del aire para que se mantengan bien crujientes y ricas. Estas galletas de turrón no han durado mucho, así que no sé cuántos días se conservan bien pero probablemente, al igual que pasa con el resto de galletas que contienen mantequilla, varios días.
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