Valverde es una localidad de poco más de 200 habitantes que ni siquiera cuenta con Ayuntamiento propio: pertenece al municipio riojano de Cervera del Río Alhama.
Se trata de un pueblo de paso, cuyas casas se extienden a los dos lados de la N-113, la carretera que une la cercana localidad de Ágreda (Soria) con Citruénigo y Castejón (Navarra).
La localidad tiene un constante ir y venir de camiones y todos sus negocios giran en torno a este tránsito: un par de bares, una panadería y un pequeño supermercado. Nada turístico. Nada reseñable.
Pero hay algo que convierte a Valverde en un pueblo único en España: aunque administrativamente depende de la Rioja, su término municipal discurre por cuatro comunidades autónomas distintas: La Rioja, Navarra, Aragón y Castilla y León.

El mojón de los tres reyes
Esta situación fronteriza no es nueva. A las afueras del núcleo urbano hay un mojón donde se juntan las antiguas provincias de Logroño, Navarra y Zaragoza, conocido como el “mojón de los tres reyes”.
Cuenta la historia que, en el año 1196 se citaron los reyes Alfonso II El Casto de Aragón, Alfonso VIII de Castilla y Sancho El Fuerte de Navarra para delimitar los límites de sus dominios, en el punto en que confluían los tres (cabe recordar que, históricamente, La Rioja pertenecía a Castilla).
Hay diversas versiones, todas ellas rozando la leyenda, sobre el encuentro. Hay quien dice que se encontraron en una casa, otros que llevaron una mesa triangular e, incluso, que celebraron una comida.
Pero, al margen de este encuentro –que puede tener orígenes históricos reales, pero cuyos detalles desconocemos–, a día de hoy la frontera entre Navarra y Aragón atraviesa la mitad del núcleo urbano, pero a menos de un kilómetro están también las fronteras con la Rioja y con la provincia de Soria, perteneciente a Castilla y León. Una circunstancia única en España.