
Iba a confesar que en mi adolescencia era muy, muy aficionada al manga y al anime, pero creo que conociendo mi nick y mi avatar no es algo que vaya a sorprender a nadie. Hoy puedo dedicarle menos tiempo pero lo que me sigue apasionando es la cultura japonesa, y cómo no, su cocina. La parte dulce se conoce menos y os animo a probar con ella también en casa, empezando con el anko o pasta dulce de judías rojas, un relleno tradicional de la repostería japonesa.
Básico en muchos dulces tradicionales japoneses, es fundamental preparar el anko judías azuki (小豆); son más pequeñitas, suaves y dulces. Los grandes maestros reposteros japoneses preparan un anko sin igual, dejando ver perfectamente la judía confitada, brillante y lustrosa, pero yo no aspiro a tanto todavía. Para no crear traumas en casa prefiero hacer el anko en una forma de pasta untable, más discreta pero también muy rica.
Dejar a remojo las judías un mínimo de 8 horas. Enjuagar y lavar muy bien las judías rojas azuki y enjuagar. Colocar en la olla a presión con un dedo de agua, llevar a ebullición y cocinar dos minutos. Escurrir el agua y devolver las judías a la olla. Añadir la sal y el medio litro de agua.
Tapar bien y cocer a presión siguiendo las instrucciones de la olla durante 15 minutos, contando desde que sale el vapor, a fuego medio. Abrir la olla, remover y agregar el azúcar, mezclando bien. Volver a calentar ya sin la tapa.
Si se prepara en olla tradicional, hervir las judías primero con abundante agua durante 10 minutos. Escurrir, volver a cubrir con agua, tapar y cocer a fuego muy bajo durante 1 hora. Destapar, escurrir el exceso de agua y añadir el azúcar, mezclando bien.
Cocinar a fuego medio-bajo, removiendo de vez en cuando, hasta obtener una textura de pasta espesa, procurando que se reduzca el líquido todo lo posible. Probar el punto dulce y añadir más azúcar si se desea. Machacar con un cucharón o triturar directamente con una batidora para obtener una textura de pasta más suave y cremosa.
Con qué acompañar el anko
El anko o pasta dulce de judías rojas se puede tomar untado en tostadas –a mí me gusta mucho, igual soy un poco rarita- o usarlo como relleno de dulces tradicionales japoneses. También podemos emplearlo para rellenar dulces occidentales, crêpes, tortitas, muffins, galletas, etc., o se puede servir con fruta, natillas, o yogur. Y es el relleno más tradicional de los famosos dorayakis.
En Directo al Paladar | 'Oishinbo. A la carte'. El manga imprescindible para todos los amantes de la gastronomía japonesa