Quien haya podido recorrer Europa en Adviento habrá descubierto el placer de calentar cuerpo y alma con un humeante vino caliente especiado al visitar los mercadillos y ferias de Navidad. El Glühwein alemán o suizo es uno de los más populares, pero también en los países nórdicos tienen el glögg, gløgg o glögi, ligeramente distinto.
Sin existir una receta única, pues en cada país, pueblo y casa se tiene una fórmula distinta, cuando no se emplea directamente embotellado o con bolsitas de especias específicas, el glögg suele añadir además licor y frutas secas, que se incluyen enlas tazas o vasos al servirlo y ponen una deliciosa guinda comestible al final del último trago.
En nuestra versión proponemos reducir el contenido de alcohol y de azúcar añadido con zumo de naranja natural. Proponemos usar la olla de cocción lenta para evitarnos tener que remover y vigilar que no se evapora demasiado líquido, pero puede hacerse perfectamente en una olla tradicional. La otra ventaja de la Crock-Pot es que libera el aroma poco a poco, y sin darte cuenta tu casa se llena de ese cóctel festivo tan reconfortante y hogareño.
Exprimir el zumo de las naranjas hasta tener unos 300 ml sin pulpa. Lavar la otra narnaja y cortar en todajas. Pelar el jengibre y cortar en dos. Disponer todos los ingredientes menos los frutos secos en la olla de cocción lenta, mezclando suavemente.
También se puede hacer con los frutos secos para que se maceren y cojan mejor sabor, aunque recomendamos ponerlos en una bolsita o gasa para poder retirarlos después antes de colar, como si fueran garbanzos en un cocido.
Encender la olla y programar dos o tres horas en potencia baja. Empezar con la tapa puesta y destapar pasada la primera hora. Se puede dejar que se enfríe en la olla una vez haya terminado. En olla tradicional, calentar removiendo a fuego suave 15 minutos; subir la potencia hasta que casi rompa a hervir, apagar, tapar y dejar una hora.
Colar antes de servir y calentar sin llevar a ebullición si se ha enfriado, repartiendo unas pasas y almendras en cada taza o vaso. Guardar lo que sobre, si sobra, en una botella o recipiente hermético en la nevera durante un par de días.
Con qué acompañar el glögg
Un vaso o taza de vino caliente especiado es ya una bebida reconstituyente, pero no podemos no recomendar acompañarlo de algún dulce navideño en estas fechas. Cualquier capricho goloso que nos guste le irá bien, aunque aconsejamos escoger bocados también especiados, con frutos secos, o alguna galleta con consistencia para mojar en el vino, como las de jengibre, amaretti o una pieza de biscotti.
Almendras garrapiñadas, un buen chocolate negro con frutos secos variados, trufas caseras intensas, marron glacé o simples castañas asadas también serán deliciosas opciones para la sobremesa o media tarde.
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