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Cosas inspiradoras que solo pasan en Australia y que deberían suceder más a menudo en otros países. Un grupo de 90 personas sin hogar y en riesgo de exclusión social pudo disfrutar ayer de un menú de lujo completamente gratis en el hotel cinco estrellas Intercontinental Melbourne Rialto. Un hotel situado en pleno corazón financiero de Melbourne, en un edificio victoriano del siglo XIX, que probablemente no habrían podido pisar si no hubiera sido por este hecho extraordinario que ha desvelado el canal australiano 9News.

Todo empezó hace un par de meses cuando el padre Angel, fundador de la ONG Mensajeros de la Paz, se asomó a la puerta de la madrileña parroquia de San Antón y se encontró con una fila de más de 200 personas que esperaban pacientemente a que les entregaran un bocadillo que llevarse al estómago. Su reacción no se hizo esperar y su rapidez de reacción se ha visto materializada en Robin Hood, el restaurante que alimenta gratis a personas sin hogar desde hace apenas unos días.

A pesar de que la solidaridad hay que mantenerla todo el año, se agradece que con la llegada inminente de la Navidad surjan iniciativas que van más allá del puro consumismo. La cadena de supermercados Lidl abre mañana su primer restaurante efímero pop up en los cines Capitol de Madrid, ofreciendo un menú exclusivo diseñado por Sergi Arola que tiene fines solidarios.

El proyecto busca que los comensales vivan una experiencia gastronómica gourmet a un precio muy ajustado, con platos de autor creados con productos propios de la línea Deluxe de la cadena. Pero lo más interesante de esta iniciativa es su componente solidario, ya que todo lo recaudado en el restaurante será donado íntegramente a la ONG Ayuda en Acción para colaborar en su lucha contra la pobreza infantil en España.

Hace unos días compartíamos con vosotros el emotivo proyecto Soul Kitchen, el restaurante solidario de Jon Bon Jovi en el que el cliente decide si paga. Hoy nos emocionamos de nuevo al leer sobre Gabriel Garza Alanís y su proyecto Destellos de Sabor.

Así como con Jon Bon Jovi nadie pestañearía al leer su nombre, pues de todos es conocido y no necesita presentación alguna, con Gabriel Garza Alanís ocurre lo contrario. Pero no os preocupéis, porque hoy os queremos contar sobre el, sobre Destellos de Sabor y sobre dónde su solidaridad le está llevando.

A estas alturas no es necesario explicar quién es el archifamoso músico, actor, compositor y productor Jon Bon Jovi, pues todo el mundo lo conoce por una u otra faceta artística, pero lo que tal vez no sepáis es que también es dueño de dos restaurantes en los que es el cliente el que decide si paga. Curioso ¿no?

Estamos hablando de Soul Kitchen, un establecimiento para gente sin hogar o con pocos recursos en el que es el comensal quien escoge pagar con dinero o con trabajos para la comunidad. Este es uno de los proyectos de la fundación JBJ Soul Foundation, creada también por el artista estadounidense, y que intenta remover conciencias y dar a conocer los problemas que sufre la sociedad.

Gastronomía y solidaridad vuelven a darse la mano con una nueva celebración de GastroTEA, una Jornada Solidaria de Alta Cocina que cumple este año en Murcia su cuarta edición. Organizada por Asteamur, Asociación Trastorno del Espectro Autista de la Región de Murcia, para esta ocasión se ha sumado un nuevo padrino de lujo, el chef catalán Paco Pérez, que cuenta con cinco estrellas Michelin repartidas entre sus restaurantes. El evento tendrá lugar el próximo 15 de febrero.

GastroTEA apuesta por conectar personalidades de la alta cocina con los más necesitados, en este caso enfocado a los niños con trastorno del espectro autista. Los fondos recaudados en esta jornada solidaria irán destinados a financiar las actividades terapéuticas, la integración de los afectados y aumentar la concienciación social sobre el autismo. Es un nuevo ejemplo de cómo el mundo de los grandes chefs, que a veces nos puede parecer algo ajeno, también puede tener su lado más solidario.

Estoy harta de leer noticias en los medios de comunicación relacionadas con la desnutrición infantil y el despilfarro de alimentos. Como persona, me resulta doloroso imaginar a niños y niñas pasando hambre, y como profesional de la gastronomía, me indigna y enfada profundamente que muchas empresas del sector desperdicien comida a espuertas a diario y lo permitan.

En Europa se desperdician, de media, más de 179 kilos de comida al año por persona, de los cuales, un 60% se encuentra en buen estado. Dos datos escalofriantes, que no los únicos, contra los que han decidido luchar Cenas con Fecha de Caducidad, un maravilloso proyecto de ocio solidario que se centra en el despilfarro de alimentos y el hambre infantil en nuestro país.

Hace un par de años nació la Asociación de Cocineros y Reposteros Amateurs de España (Acrame) y, desde entonces, no ha parado de llevar a cabo iniciativas solidarias en ayuda de los más necesitados. Esta asociación, cuya labor es encomiable, ha colaborado con diferentes organizaciones sin ánimo de lucro, siempre fomentando y acercando el noble arte de cocinar a todo el mundo.

Acrame ha acercado la gastronomía a personas sin techo y a comedores sociales, promovido actividades con niños fomentando el interés por la cocina, ayudado a familias a diseñar menús de bajo presupuesto, sin renunciar a una alimentación saludable, etc. Por si esto no fuera suficiente, el pasado martes 24 de noviembre Acrame presentó su último proyecto: "Bocados Solidarios".

Después de varios años de una grave crisis económica nuestro país empieza a ver la luz al final del túnel. Pero no nos engañemos: aún hay muchas personas y muchas familias que siguen necesitando nuestra ayuda para poder comer. Ahora que se acerca la Navidad la Federación Española de Bancos de Alimentos vuelve a poner en marcha la Gran Recogida, que tendrá lugar en los centros de todo el país los próximos días 27, 28 y 29 de noviembre.

Durante las fiestas se desata nuestro lado más consumista y todos caemos en mayor o menor medida en los excesos típicos navideños - y tampoco pasa nada por celebrar a gusto la Navidad -, pero también es un buen momento para recordar el espíritu solidario de esas fechas. Con el lema 'El hambre sigue ahí', desde los Bancos de Alimentos nos quieren recordar que hay miles de personas que viven bajo el umbral de la pobreza y que necesitan ayuda para acceder a alimentos básicos.

El hierro es un mineral clave en nuestra salud participando en la producción de hemoglobina y evitando la aparición de anemia. También contribuye a la formación de las proteínas musculares y a la metabolización de ciertas enzimas de nuestro organismo. La realidad en que la deficiencia de hierro afecta casi 3,5 millones de personas en todo el mundo, comprometiendo la capacidad cognitiva de los niños y un mayor riesgo a padecer otras enfermedades entre otras muchas dolencias.

Imagina que la grave situación que viven estas personas puede cambiar con un simple objeto. Esto es lo que puede conseguirse gracias la empresa solidaria The Lucky Iron fish, el pez de hierro que contribuye a incorporar hierro en la dieta.