
Tres de nuestras palabras favoritas en el nombre de una receta: tarta, turrón y sin horno. Si a estas sumamos, fácil y rápida, entonces es posible que consigamos que caigas en sus redes de la misma manera que nos ha ocurrido a nosotros. Esta tarta de turrón sin horno es el no-va-más de los postres navideños, una manera fabulosa de lucirse con poquísimo esfuerzo.
Además de todo esto, a esta tarta no le hemos añadido nada de azúcar. El turrón y las galletas de la base ya van bien cargados, así que hemos optado por prescindir de él. Y ha sido todo un acierto, oigan. El resultado es una tarta cremosa, en su punto justo de dulzor, que ha conquistado, incluso, a los menos aficionados al turrón de la casa. Con eso lo decimos todo.
Fundimos la mantequilla en el microondas o en un cacito al fuego. Trituramos las galletas y las mezclamos con la mantequilla y un poco de leche. Cuando hayamos obtenido una masa homogénea, cubrimos con ella la base de un molde desmoldable de 18 cm de diámetro, forrado con papel de horno (base y paredes). Guardamos en la nevera mientras preparamos el relleno.
Hidratamos la hojas de gelatina en agua muy fría. Troceamos el turrón y lo introducimos en un cacito junto con la leche. Calentamos al tiempo que removemos hasta que el turrón se haya disuelto e integrado. Añadimos entonces la nata líquida y mezclamos bien.
Retiramos el cacito del fuego y añadimos las hojas de gelatina bien escurridas. Removemos para homogeneizar y vertemos el molde, con cuidado para no dañar la base. Esperamos a que atempere antes de pasar a la nevera, donde dejamos enfriar seis horas o, incluso mejor, toda la noche.
En el momento de consumir retiramos la tarta de la nevera. Desmoldamos, retiramos el papel y colocamos en un plato de servir. Cubrimos con almendra crocanti y servimos tal cual o acompañada como recomendamos a continuación.
Con qué acompañar la tarta de turrón sin horno
A esta tarta de turrón sin horno no le hace falta nada, es deliciosa por sí sola. No obstante, si la servimos como postre de Navidad y queremos lucirnos, la podemos decorar con un poco de nata montada, chantilly o un coulís de frutos rojos. La acidez de estos últimos le sienta de fábula.
En Directo al paladar | 19 postres de Navidad que se hacen en 10 minutos
En Directo al paladar | Las 215 mejores recetas de Navidad y 16 menús especiales para acertar seguro